Tal como apunta el título de esta nueva entrada, hoy vamos a explicar cómo hacer una casa de muñecas de forma fácil y económica (¿qué es eso de gastarse cientos de euros en una casa de muñecas cuando puedes hacértela tú misma a tu propio gusto y necesidades?). Para ello utilizaremos elementos económicos que podemos encontrar en cualquier tienda de todo a 1€, Tiger o Ikea. Mi casa de muñecas tendrá un tamaño perfecto para nendoroids, pero si queréis hacerla vosotros más grande, sólo tenéis que aumentar las medidas y dejar volar un poco la imaginación, seguro que encontráis una manera económica y divertida de crear la casa de muñecas a vuestra medida.
Hoy empezaremos creando los suelos para nuestra casita, en próximas entradas veremos las paredes y resto de elementos propios de una casita de muñecas.
Materiales:
- 16 posavasos de madera (4 por cada habitación que queremos hacer). Los míos miden unos 9,75 x 9,75 cm cada uno.
- Pegamento de contacto (yo usé Supergen).
- Pasta de secado al aire (preferiblemente blanca).
- Rasqueta, palo de helado o cualquier otra cosa fina y recta.
- Lija.
- Pintura al agua (yo uso pintura de miniaturas de warhammer, que es la que tengo a mano, pero cualquiera vale).
- Pincel.
Procedimientos:
1. Primero alineamos cuatro posavasos procurando que el sentido de la madera coincida de forma horizontal y vertical (la veta mirando siempre de izquierda a derecha en cada uno de los posavasos, por ejemplo).
2. Con el pegamento de contacto vamos pegando los posavasos entre sí para formar una losa mayor, procurando que las uniones queden rectas. Usar el pegamento justo, si cuando unamos surgen gotas de la unión, las limpiamos con un trapo.
3. Cogemos la pasta de secado al aire y teniendo cuidado, separamos pellizcos que vamos embadurnando en las uniones de los posavasos, que probablemente no hayan quedado del todo alineadas por las pequeñas diferencias entre posavaso y posavaso (incluso siendo del mismo paquete). Además, así tapamos el agujero que se nos quedaría en medio si usáis como yo posavasos de esquinas redondeadas.
4. Quitamos el sobrante de la pasta con una rasqueta (yo en mi caso tenía más a mano un palo de helado para hacer manualidades y es lo que usé, con que sea una pieza alargada, fina y recta vale). Dejamos secar la pasta (mientras, podemos ir haciendo el resto de posavasos).
5. Una vez seca la pasta, cogemos lija y lijamos nuestros posavasos, incidiendo en las uniones para dejar fina y suave la pasta de modelado.
6. Repetimos los pasos 3, 4 y 5 también por el reverso de nuestros posavasos, para tener los dos lados bien unidos, pulidos y listos para el siguiente paso.
7. Cogemos un color de pintura base para nuestro suelo. En este caso me he decantado para el blanco, y así cubrir el color de la madera de los posavasos ya que mi idea es empapelarlos para hacer efecto moqueta.
8. Damos doble cara de pintura por ambos lados de cada una de nuestras planchas de madera. ¡Felicidades! ¡Ya están preparadas para el siguiente paso!
En las próximas entradas veremos dos formas de rematar nuestros suelos: con moqueta o con parqué de madera. ¡Así que estad atentos y no os lo perdáis!
Hoy empezaremos creando los suelos para nuestra casita, en próximas entradas veremos las paredes y resto de elementos propios de una casita de muñecas.
Materiales:
- 16 posavasos de madera (4 por cada habitación que queremos hacer). Los míos miden unos 9,75 x 9,75 cm cada uno.
- Pegamento de contacto (yo usé Supergen).
- Pasta de secado al aire (preferiblemente blanca).
- Rasqueta, palo de helado o cualquier otra cosa fina y recta.
- Lija.
- Pintura al agua (yo uso pintura de miniaturas de warhammer, que es la que tengo a mano, pero cualquiera vale).
- Pincel.
Procedimientos:
1. Primero alineamos cuatro posavasos procurando que el sentido de la madera coincida de forma horizontal y vertical (la veta mirando siempre de izquierda a derecha en cada uno de los posavasos, por ejemplo).
2. Con el pegamento de contacto vamos pegando los posavasos entre sí para formar una losa mayor, procurando que las uniones queden rectas. Usar el pegamento justo, si cuando unamos surgen gotas de la unión, las limpiamos con un trapo.
3. Cogemos la pasta de secado al aire y teniendo cuidado, separamos pellizcos que vamos embadurnando en las uniones de los posavasos, que probablemente no hayan quedado del todo alineadas por las pequeñas diferencias entre posavaso y posavaso (incluso siendo del mismo paquete). Además, así tapamos el agujero que se nos quedaría en medio si usáis como yo posavasos de esquinas redondeadas.
4. Quitamos el sobrante de la pasta con una rasqueta (yo en mi caso tenía más a mano un palo de helado para hacer manualidades y es lo que usé, con que sea una pieza alargada, fina y recta vale). Dejamos secar la pasta (mientras, podemos ir haciendo el resto de posavasos).
5. Una vez seca la pasta, cogemos lija y lijamos nuestros posavasos, incidiendo en las uniones para dejar fina y suave la pasta de modelado.
6. Repetimos los pasos 3, 4 y 5 también por el reverso de nuestros posavasos, para tener los dos lados bien unidos, pulidos y listos para el siguiente paso.
7. Cogemos un color de pintura base para nuestro suelo. En este caso me he decantado para el blanco, y así cubrir el color de la madera de los posavasos ya que mi idea es empapelarlos para hacer efecto moqueta.
8. Damos doble cara de pintura por ambos lados de cada una de nuestras planchas de madera. ¡Felicidades! ¡Ya están preparadas para el siguiente paso!
En las próximas entradas veremos dos formas de rematar nuestros suelos: con moqueta o con parqué de madera. ¡Así que estad atentos y no os lo perdáis!
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